La hija de la bruja

Una madre condenada por decir la verdad. Una hija salvada por una mentira.

Autora:

Kathleen Kent es una escritora americana. Fue galardonada con el premio David J. Langum gracias a este libro. Para escribir “La hija de la bruja” se inspiró en la vida de una de sus antepasadas (Martha Carrier) que, a finales del siglo XVII fue acusada y ejecutada por brujería en los juicios de Salem.

Sinopsis:

Ambientado en el Massachussets de 1690, este libro narra la historia de una familia, los Carrier, en el transcurso de los años previos a los juicios de Salem en los que parte de esta familia, al igual que otras cientos de personas, fueron acusadas e, incluso, ejecutadas por brujería. Cuenta de forma detallada como un pueblo fue capaz de dejarse llevar por el fanatismo religioso y las supersticiones.

Nada mejor para describir la historia de este libro como la primera página del mismo: “En 1630 el gobernador Winthrop fundó una colonia en la bahía de Massachussets con un pequeño grupo de hombres y mujeres llegados desde Inglaterra al Nuevo Mundo. Estos puritanos –así se denominaron- se asentaron en las colonias sobreviviendo a la guerra, las plagas y a la mano del demonio, en una pequeña localidad llamada Salem. Una mujer y su familia se resistieron a esa tiranía religiosa, sufriendo encarcelamiento, torturas y muerte. Sus indignadas y desafiantes palabras fueron recogidas por Cotton Mather, quien la apodó la Reina del Infierno. Su nombre era Martha Carrier”.

Valoración:

Este libro me lo compré en las rebajas de Navidad porque me llamó la atención el título. Para mi gusto, aunque hace una reflexión enorme sobre los juicios de Salem, la escritora ocupa demasiada historia contando los años anteriores que vive la familia. Aún así, debo decir que hay fragmentos de esta obra que siempre me acompañarán y que he aprendido una lección muy importante de Martha Carrier, una mujer que se enfrentó a la muerte por defender sus ideales, su honor y, sobretodo, por plantar cara a la tiranía de un pueblo que se dejó llevar por el miedo. Toda una lección en la vida.

Personajes importantes:

Sin duda alguna, el personaje más importante de toda la novela es Martha Carrier, por su valor. Una persona capaz de enfrentarse a toda una comunidad por defender la verdad, aún sabiendo el precio que tendría que pagar.

Puntos fuertes del libro:

Una de las partes que más me gustaron del libro es una reflexión de Sarah Carrier durante su encarcelamiento y que me hizo estar varios días pensando sobre la verdad que encierra:

“Es cierto que algunas personas, ante la muerte de un ser querido, son capaces de perder las ansias de vivir, rechazando cualquier alimento o si sufren un dolor demasiado intenso o sus heridas son preocupantes. Pero un niño, que prácticamente acaba de empezar a vivir desde el vacío de la creación, puede ser más resistente que el más fuerte de los hombres, con una voluntad más férrea que la mujer más dura. Un niño es como un incipiente bulbo primaveral que encierra todas las alegrías necesarias dentro de su piel para tratar de salir de la tierra hacia el sol. Y de la misma forma que un poco de agua puede hacer que el bulbo crezca, incluso en un terreno pedregoso, un poco de amabilidad puede proporcionar a un niño la vida necesaria para emerger de la oscuridad”. (pág 289).