Dos años después de mi última entrada he decido volver a escribir en le bolg. ¿Por qué? Quizás porque me permite desahogarme de alguna manera, dejar mis ideas y mis pensamientos en un espacio abierto...
Me encontré con esta historia antes de conocer la existencia del libro, a raíz de que una amiga me recomendó una serie con el mismo título, la cual se basa en el libro. Debo reconocer que la serie me encantó, aunque el personaje de Piper (la protagonista) no termina de convencerme...
A pesar de que la base es la misma, la serie cambia bastantes cosas con respecto al libro, por lo que en esta entrada me centraré en la historia de la novela.
Piper es una mujer estadounidense, de clase media-alta que a los veintidós años aproximadamente se involucra en asuntos de drogas, participando en una banda de narcotraficantes, como consecuencia de la búsqueda de nuevas aventuras. Diez años después, y tras haber cambiado completamente su vida, la justicia le reclama pagar por su pasado, por lo que es sentenciada a pasar un año en la prisión de Danbury, considerada de mínima seguridad. Allí vivirá nuevas experiencias, conocerá a gente que le hará replantearse su propia vida y aprenderá de cada momento.
El personaje de Piper, a diferencia del de la serie de televisión, me gustó. Es una mujer consciente de su realidad, del por qué acaba en la cárcel, que intenta mejorar en cada momento, aprender del resto de mujeres, no dejarse llevar por las apariencias...Una mujer fuerte, decidida, capaz de enseñar un lado de las prisiones que rompa con el estereotipo de las personas que allí viven.
Realmente, el motivo por el cual he decidido volver a reseñar libros empezando por Orange is the new black es porque es un libro que me ha hecho replantearme cosas que, de normal, no suelo pensar. Tenemos estigmatizadas a las personas que acaban en prisión. Los medios de comunicación, y la sociedad en general, tendemos (sí, yo también) a deshumanizar a muchas de las personas que hay en las cárceles, sin tener en cuenta la historia personal de cada una de ellas, el por qué de su situación, qué les ha llevado allí, cómo son las condiciones de vida que tienen en prisión, etc. Dejamos de pensar en ellas como personas. Pasan a ser reclusas/os en un sistema que intenta castigarles por los "daños" cometidos, en lugar de ser lo que supuestamente deberían ser: un lugar de "reeducación" (no termina de convencerme este término, pero no sé cuál usar). Creo que este libro puede ser una forma amena de empezar a cuestionarse muchas cosas, no sólo cómo se encuentran las prisiones, sino cómo enfrentan las personas su paso por ellas, qué supone en sus vidas, cuan diferente son esos efectos en función de la posición social de las personas... En definitiva, un comienzo para cuestionarse las cosas y pensar.
